01 noviembre 2009

Absurdos


No lo pensó. Sólo lo hizo. Mente en blanco. Ausente de la realidad, llamó, ajeno a sus acciones.
Se estremeció. Pensó. Dudó. Tardó dos segundos en decidirlo. Contestó con el alma pendido de un hilo.
-No sé porque he llamado.
-Ni yo porque he contestado.

No pretendía hablar con ella, ni siquiera quería. Había agotado las palabras, pero la llamó y lo que pensara ella, sobre sus razones, no le importaba.
Lo último que le apetecía era oir su voz. Intercambiar frases añejas sin sentido, pero contestó, sin importarle lo que el pensara sobre sus motivos.
-¿Y ahora qué?
-No lo sé.


Le hubiera dicho todo en lo que pensaba, cuando no podía dormir, pero no sabía cómo hacerlo, tampoco le sobraban las ganas para encontrar la forma.
Esperaba su turno de réplica. Todavía quedaban reproches que hacerse, aunque aquel no era el mejor momento. Ningún momento era bueno para alargar la agonía del adiós.
-Cuídate.
-Tu también.

Algún día esperaba que estuviera bien, ahora solo deseaba que su duelo durase tanto como el suyo. El tiempo les apaciguaría.
Se liberó del sentimiento de culpabilidad que tenía por darse cuenta antes que él, de que las cosas no funcionaban. Tarde o temprano, tenía que suceder, pero ella se le adelantó.


Cuando el amor muere, enterrarlo profundamente solo servirá para que brote de la tierra con más fuerza.


8 comentarios:

sofiasaavedra dijo...

¿Y si se entierra y luego se urbaniza el terreno? ;)

Lo que queremos desterrar es lo que queremos que permanezca en nosotros, en el fondo.

Un beso.

Pd: Yo también quiero ser bruja :)

Uno dijo...

Y hay amores que aunque muertos se insiste hacerlos pasar por vivos, se les lleva a todas parte, pero lo único que consiguen es enrarecer el ambiente.

carlosideal dijo...

Hacer cosas sin darte cuenta de que las estás haciendo, puede crear conflictos :)

Cuanto más quieres deshacerte de algo, más cuenta te das, de que lo necesitas. Llámalo "amor".

Un beso.

Cadaver exquisito dijo...

que dificil es decir adios.... pero si lo entierro no quiero que brote con mas fuerza :(

Fiebre dijo...

Ese es un aprendizaje que deberían enseñarnos desde pequeños y nos ahorraríamos muchas situaciones absurdas.

Asignatura: "No alargar lo inevitable".
P. A (Progresa Adecuadamente)

La Frufrú dijo...

Los fantasmas, cuanto más lejos de mí, mejor, sean del tipo que sean.

Para deshacerse de cosas, echarlo al retrete y tirar dos veces de la cadena, funciona, o guardarlo bajo siete llaves.

Un beso.

Pd: tu crítica musical preferida, se pregunta de dónde habrás sacado la pieza prehistórica con la que no has amenizado (atormentado), la lectura. ¿De un mal entierro? :)

zimbagüe dijo...

Si el resurgimiento es bueno, yo mismo con una pala quito la arena.

Cuando lo zanjado vuelve, o no estaba bien zanjado o vale la pena probar de nuevo, por si acaso :)

Daniela Haydee dijo...

SOFÍA SAAVEDRA: puede ser, pero a veces lo que queremos en el fondo, es lo que más daño hace. Cuanta controversia!

Un beso.

UNO: esos amores, no los queremos. Los zombis en las películas :P

CARLOSIDEAL: Cierto. Pero si te das cuenta de que lo necesitas, también se sabrá buscar como remediarlo. Sería mucho peor no ver nada :P

Un beso.

CADAVER EXQUISITO: entiérralo bien, para que no se le ocurra volver a despedirse otra vez.

FIEBRE: La teoría aprendida, es un grado, pero la práctica no suele ser tan agradable, aunque no por ello menos necesaria :P

LA FRUFRÚ: Demasiado malgasto de agua para tan poca cosa ;P

¿Atormentados? No...

ZIMBAGÜE: Me gusta tu planteamiento. Lo tendré en cuenta :P