27 febrero 2011

La historia terminable

El vecino basurero deambula por la calle. Ha sido un día duro. Los ojos le escuecen y algún pollo ha cambiado por polla y viceversa.
Errores humanos. Todos los cometemos.

Piensa en la mala mujer. La atleta improvisada se la ha recordado. Debería llamarla y decirle que los corazones son propiedad privada y no se pueden robar. Será lo primero que haga al llegar a casa. Oír su voz.
-¿La revancha?
Pregunta Yara poniendo la misma cara que en las últimas 70 revanchas.
-Porfa Nenuco.
-Tú ganas. Me tienes aburrido. Ni una más. ¿Qué quieres?
-Quiero...

Mira a su alrededor, se acerca al propósito y le susurra algo al oído...
Maldita sea, a penas se ha girado ha relampagueado, mala señal. Ya se lo estaba indicando su pata mala. Inevitablemente el abrumador sonido del trueno avasalla el silencio de la noche. Maldita sea. El viejo acelera su andar, no son más de veinte pasos pero pinta mal.
¿Que fue eso?
¿... y eso otros?
Maldita sea, ya caen enormes goterones, seguro que eran cómplices de algún diluvio. Seguro que llega a casa empapado.... y la tipa esa, la corredora, ya puede empezar a echar una de sus carreras, ya puede porque con la que va a caer se la va a mojar hasta el alma.
La mala mujer contesta al teléfono.
-Mala, ladrona de corazones.
-¡Trajano! ¡Qué sorpresa, lindo! Oye no me tengas en cuenta aquello, hombre, que ya ha pasado mucho tiempo y últimamente los días parecen que van más deprisa.
-Te llevaste mi corazón, mala mujer usurpadora.
-No, no, no. Lo cogí prestado, pero pensaba devolvértelo cuando estuviera listo. Ya sabes que mi hermano es brujo o algo así, bueno, pues se lo llevé al diablo para que lo hiciera más grande y cupiera todo el amor que tengo para darte. Lo hice por nosotros, lindo mío.
-¿Y los otros hombres?
-Ninguno de importancia, pasatiempos para olvidarte, pero eso es imposible, mi lindo.
-Ah bueno, si es así... si eso volvemos, pero me tienes que devolver el corazón.
-Trato hecho.
No hay mujeres malas, solo percepciones disparatadas.

Todo ocurre en un instante.
El propósito la mira con cara rara antes de irse "para esto tanta persecución, bah"
Se marcha con las primeras gotas.
-¡Eh, tú! ¡Me lo debes! -Grita Yara.
-¡Concedido!¡Déjame en paz! ¡Con la lluvia encojo!

Yara empieza a saltar de alegría.
Todo ha cambiado. Ya tiene lo que tanto quería.

Lo que Yara susurró al oído del propósito antes de que éste se fuera, aún resonaba en su cabeza:”QUIERO volver a SER YO. Quiero no querer parecer joven. Yo amé a Matusalén. Le vi nacer y esperé a que creciera, sabiendo que iba a ser para mí. Vivimos más de novecientos años felices, pero se acabó yendo con otra… Quiero ser la vieja que soy y encontrar mi alma en el huerto que heredé de mis abuelos. QUIERO SER YO.


-----O-----


Las historias empiezan y acaban. Esta podría continuar durante tiempo indefinido y acabaríamos dejando de ser "sus autores", para convertirnos en mensajeros de una voz que nos dictara las palabras sin darnos cuenta (que nadie piense en transtornos mentales, más bien esa voz obedecería a la implicación que se establecería con los personajes). La historia se escribiría sola. Lo del experimento sociológico era el cebo... o no.
Sea como fuere en cada trocito escrito, hay una parte de nosotros, la que nos gusta o disgusta; la que se permite licencias o se cohibe; la que mostramos habitualmente o la que ocultamos y solo dejamos salir mezclada con el surrealismo más imperante. Dejar ir la mente deliberadamente mitiga malhumores y los peores días.

Gracias a todos por el esfuerzo y por seguirme en esa corriente que a veces no sé muy bien hacia donde va. Esta es la historia de vuestra historia, de nuestra historia y de una historia terminable.

8 comentarios:

La Frufrú dijo...

Lo acabo de leer todo entero y no tiene ningún desperdicio, si hasta parece coherente en algunos trozos.

Moraleja, estamos todos como cabras :P

Un beso.

Yessi dijo...

Bueno, pues aunque es apenas mi segunda visita, me parece genial todo lo que aqui han escrito, muy interesante, es un ahistoria con pies y cabeza perfecatmente delineados.

Un abrazo.

carlosideal dijo...

Danieluski, solete, de aquí a encabezar la lista de best-sellers más vendidos. Que te lo digo, que tengo buen ojo.

Ve pensando como nos repartiremos los beneficios :P

Un beso.

zimabagüe dijo...

Con tu sutileza habitual, nos llevas a donde quieres :)

Esto da para una segunda parte. El diablo y el propósito tienen un pasado en el que hay que profundizar y la mala mujer también. ¡Hasta Ygriega tiene cosas que contar!

Un abrazo.

Daniela Haydee dijo...

LA FRUFRÚ: La locura, bien dosificada es eleva almas :P

Sois buenos.

Un beso.

YESSI: Agradezco la generosidad de tus palabras en un experimento que no ha ido mal del todo. Al menos nos hemos divertido.

Gracias por tu segunda visita :P

Un abrazo.

CARLOSIDEAL: Los fines lucrativos, no estaban contemplados en el experimento sociológico, pero como aportación, agradezco fervor literario. Más fe como la tuya harían falta, para hacer milagros.

Un beso.

ZIMBAGÜE: Tu entusiasmo me desborda. Las historias no acaban, si hay quienes quieren continuarlas.
No descarto absolutamente nada :P

Un abrazo.

Uno dijo...

Aliviadito me siento que haya acabado. Me tenía intraquilo.

Prefiero tus entradas habituales que un "collage" de "extraños".

Saludos desde tu pueblo

sofiasaavedra dijo...

Ya no tengo que estar a la altura de nadie, ha sido divertido, pero pensar en escribir algo que se puede leer es estresante.

Si hay una próxima vez, estaré preparada.

Un beso.

Daniela Haydee dijo...

UNO: Eso es porque has llegado a mitad del experimento, pero los "extraños" que han participado, tienen mentes prodigiosas capaces de adaptarse a la situaciones que les propongo.

Hay mucha imaginación ahí fuera :P

Un saludo desde tu tierra.

SOFÍASAAVEDRA: Como te entiendo, Sofía. A mi me pasaba lo mismo cuando empecé con el blog y a veces, cuando leo vuestros comentarios o leo otros blogs, pienso que nada de lo que escriba va a ser tan bueno como los que decís, pero entonces es cuando otro pensamientos llego ¿a qué altura hay que estar?.
Escribo porque quiero, y no porque tenga que valorarme nadie.

La próxima vez, en caso de que exista, tómatelo como un juego y sobre todo, pásatelo bien jugando o no haciéndolo :P

Un beso.